El Arnés de cabeza, como podemos observar en la imagen sujeta al perro de la base de la cabeza y del hocico, no es agresivo para el perro.
Casos en los que puede ser de utilidad:
- si el perro tira mucho de la correa,
- si no presta atención,
- si se muestra agresivo cuando va de la correa.
- le hace orientar la mirada hacia su dueño,
- simula la sujeción del hocico.
- ponérselo mientras le das de comer o mientras este jugando con el,
- sujetelo por el arnés cuando ya lo tolere perfectamente.
Es normal que como cuando acostumbramos al perro a un sistema de sujeción nuevo se muestre incomodo, debemos acordarnos de cuando les colocamos el primer collar, cuantos ratos se paso intentando sacárselo y rascándose.
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